Esos colores con los que los aficionados se sienten identificados y que supone la seña de identidad de los 20 clubes de la mejor liga del mundo. Está claro que esa selección no necesitaba de esas ayudas porque según todos los cronistas puede que fuera la mejor selección brasileña de la historia (o al menos, muy cerca de la de México 70), y contradictoriamente, no ganó el mundial. Añadir que Brasil también tiene casi fijo el uniforme de los porteros, que en el 90% de las ocasiones es completamente gris o plateado.