Dicha superioridad fue extendida al ámbito del Río de la Plata, ya que obtuvo 5 de las 6 Copa Aldao en las que participó enfrentando al campeón de Uruguay más una edición inconclusa, en la que se impuso en el primer partido. Al año siguiente vuelve a ser campeón logrando así el tercer tricampeonato de su historia. Ese año le realizaron un partido homenaje a Ángel Labruna quien cumplía 25 años desde su primer año en las inferiores y 20 de su debut en primera.